Para proteger su planta y su mercadería, el industrial recurre a
distintos seguros. Sin embargo, la demanda se concentra cada vez más en
la cobertura de Todo Riesgo Operativo que ya casi desplaza a la
tradicional de Incendio.
Asimismo, el incremento de la litigiosidad impulsa a las pólizas de
Responsabilidad Civil (RC) De este modo, el fabricante se protege desde
la contaminación súbita y accidental hasta de los daños que un producto
puede ocasionarle al consumidor o usuario. “Interpretamos que la mejor
manera de relacionarse a largo plazo con un cliente es brindando
protección al negocio. Ante una fatalidad se paga el siniestro. Pero
pueden quedar también involucradas otras cuestiones, como la marca”,
reconoce Estanislao Mora, suscripto Senior de Chubb Argentina.
Ante esa posibilidad, los industriales le dan ahora más importancia a
las pólizas contra terceros que a las patrimoniales. No existe ningún
tipo de seguro obligatorio para este sector. Por otra parte, nadie puede
obligarte a resguardar tus activos”, agrega Carlos Facal, director
Académico del Posgrado en Seguros de la USAL. Pero la necesidad manda.
Y, hoy por hoy, la industria está acechada por múltiples peligros.
Sin duda, la cobertura de Incendio es un clásico. Nacido originalmente
con la catástrofe de 1666, en Londres, algunas organizaciones pequeñas y
medianas siguen contratándolo pues su exposición al riesgo es baja.
Además, es un buen paraguas" para una amplia gama de contingencias
(fuego, rayo, explosión, entre otros). “No obstante ello, la cobertura
de Todo Riesgo Operativo (TRO) lo reemplaza cada vez más”, advierte
Tomás Sinclair, presidente de Gamasi, asesores de seguros. Por eso, ocho
de cada 10 clientes -sin importa su tamaño- prefieren TRO a Incendio,
según los expertos.
Todo Riesgo
Además, la póliza de Todo Riesgo se la puede ampliar de acuerdo a las
necesidades de cada uno. Por ejemplo, se lo puede extender a lucro
cesante, proveedores, rotura de maquinarias o consumidor final. Esta
situación se da porque abarca cualquier daño súbito salvo los
expresamente excluidos en el contrato.
Existe como una regla tácita: a partir de los $ 10 millones, se
justifica tomar una póliza de Todo Riesgo Operativo”, indica Marc
Herzfeld, director Ejecutivo de Alea broker de seguros. Cabe recordar
que esta cobertura se creó allá por los años ‘90 en Gran Bretaña. “En la
Argentina, se la comenzó a utilizar a mediados de esa década. Pero,
cobra ímpetu pasado el 2000”, subraya Silvina Carrizo, subgerente
adjunto de El Comercio Seguros.
Según los analistas, otro de los atractivos de esta cobertura es
abaratar costos. “Desde mi punto de vista, lo más positivo de esta
cobertura no pasa por el precio sino porque se cuenta con un solo
vencimiento y momento de renovación”, marca, no obstante, Mora.
Por otra parte, el aumento de los robos y de las exigencias del público
lleva a una demanda sostenida de póliza de transporte. “Hoy por hoy, no
falta nunca esta póliza porque los productos deben llegar al cliente en
buen estado. Es bien sabido que la cadena de valor termina en el
consumidor final”, puntualiza Hernán Cantillo Perdomo, profesor de
Administración del Riesgo y Control de Pérdidas en la especialización de
seguros de la USAL.
Ante ese panorama, una cantidad cada vez mayor de industrias
complementa la cobertura de TRO con una de RC. “La Responsabilidad Civil
cobró fuerza cuando muchas fábricas argentinas salieron a exportar. La
tomaron para poder ingresar sus productos a otros mercados. Asimismo,
las firmas internacionales visitaron a sus clientes locales y le
exigieron esa póliza”, comenta Cantillo Perdomo.
Responsabilidad Civil
No se puede dejar de lado que el ejercicio de la actividad de una
planta fabril o su mercadería puede producir accidentes a terceros. “En
los últimos años, el crecimiento de la litigiosidad influyó en la
demanda de esas coberturas”, destaca Juan Segundo Herran Marco, gerente
de Siniestros-Seguros Generales de Mapfre.
Por ese motivo, nueve de cada 10 fábricas están protegidas por una
cobertura de RC. Incluso, los seguros Integrales de Comercio cuentan con
una Responsabilidad Civil limitada. Es importante recordar que tal
decisión se basa en lo fijado en los artículos 1.902 y 1.903 del Código
Civil. Ellos determinan que aquel que por su accionar culposo o
negligente ocasione un daño a otro, es responsable de repararlo. También
deberá afrontar los inconvenientes producidos a terceros para los
productos que haya diseñado, manufacturado, construido, instalado,
vendido, tratado o reparado.
Ahora, los empresarios del país se dan cuenta que no basta con
resguardar la propiedad sino también los peligros propios de su
industria y mercadería”, enfatiza el profesor de la USAL.
Debido a ello, en los últimos tiempos, existe un creciente interés por
las coberturas de RC de producto. “Estas pólizas poseen una exposición
al riesgo mayor porque acompañan un bien desde que lo producen hasta que
lo compran”, marca Herran Marco.
En general, la cobertura de Responsabilidad Civil se negocia de modo
conjunto con una de TRO. Su costo ronda entre 10% y 30% de total de Todo
Riesgo Operativo. Este porcentaje puede incrementarse alrededor de 10%
para la RC de productos. Además, varía si el artículo es para venta
local o en el exterior.
Una cosa es comprar una póliza aislada y otra un buqué. Así, la
componente de Responsabilidad Civil se abarata”, resalta Pablo
Curatella, subgerente del Área Técnica de Mapfre.
Parques Industriales
La situación varía un poco si la industria es parte de un parque
industrial. En estos casos, el administrador del polo puede sugerir la
contratación de determinadas
Al entrar a trabajar en un parque industrial, el gerenciador fija
muchas veces cuáles son los seguros obligatorias para cada miembro pues
debe velar por el bienestar de todos”, acentúa Estanislao Mora. Esto
sucede en especial con RC. De lo
contrario si el desperfecto de una planta afecta a sus vecinos deberá responder con su propio patrimonio.
Un párrafo aparte merecen las fábricas pymes. “Como en otros ámbitos
empresariales, estas industrias hacen lo que pueden. Muchas veces
incurren en errores. No evalúan bien el costo-beneficio a la hora de
contratar un seguro”, acota Silvia Caviola, director del Departamento de
Economía y Finanzas de la UADE.
Es común que las pymes busquen más el precio y dejen de lado la RC. Sin
embargo, existen en plaza combinados de Incendio complementados con
otras coberturas como Responsabilidad Civil. De este modo se obtiene
-dicen- un producto casi 5% más económico que un TRO. “Según mi
experiencia, de 10 pymes todas toman TRO actualmente. Esto sucede porque
es un texto amplio. Por eso, Incendio tiende a perder terreno”, exalta
Sinclair.
Los asesores
En materia de seguros, el secreto radica en reducir - primero que nada-
a su mínima expresión la posibilidad de un siniestro, advierten desde
el mercado. “Este objetivo se logra implementando dos cosas. La primera,
con las medidas de seguridad e higiene. La segunda, no escatimando a la
hora de pagar la prima”, remarca el suscripto de Chubb.
Muchos empresarios del sector no evalúan las dimensiones reales de sus
peligros, ven como remota la probabilidad de que sus plantas o
maquinarias sufran un percance. Sin embargo, en cierta forma, una visión
sensata de esta cuestión se relaciona con la madurez de la fábrica. En
menor o mayor medida, más industrias recurren a consultoras en ese tema.
Cuando uno aborda un cliente nuevo nota muchas falencias en cuanto a
coberturas contratadas. Seguros no es un tema muy interesante. Pero debe
estar en la agenda de todo ejecutivo. La falta de una póliza puede
dejarlo fuera de un negocio ante una contingencia”, dice Herzfeld.
Incluso, las pymes ya se asesoran pues saben que un buen manejo del
riesgo les permitirá mantenerse en el tiempo y ser rentables, según los
expertos consultados. “En una planta, debe realizarse análisis de
riesgo, no sólo para establecer cuáles son sus puntos débiles. Sobre
todo, para determinar que está dispuesto a asumir el empresario”, marca
Facal.
El rol del asesor de seguros no es sólo conseguir un buen mix de
costo-beneficio. Esto debe reflejarse tanto en pólizas como en precios.
“Un punto no menor es que el productor sabe de la 'letra chica'y debe
ser un experto en ese punto”, destaca Herzfeld de Alea. Respecto a los
precios, el broker puede conseguir mejores valores pues maneja volumen.
Esto lo logra sin caer en que 'lo barato que salga caro'. En ese
sentido, puede lograr rebajas que van desde el 10% al 60%.
A diferencia de otras actividades, el índice de accidentes no pesa a la
hora de contratar una póliza para una planta industrial. En la
industria, la frecuencia de siniestralidad es muy baja. Está por debajo
de 1%”, explica Tomás Sinclair, de Gamasi.
Desde el punto de vista de precios, el sector industrial es considerado
un mercado 'blando'. Esta calificación se debe a las bajas continuas
que experimentan esas pólizas. Este comportamiento se observa desde el
2003 a nivel internacional. “En gran medida, responde a una
sobreoferta”, afirma Carrizo, de El Comercio. Así, estos valores caen 5%
promedio por año. Además, las coberturas de los grandes
establecimientos son en dólares.
Reaseguro e inflación
Lógicamente, la valuación de los bienes a riesgo refleja la inflación.
“Por ello, las sumas aseguradas como las primas se modifican año a año”,
subraya el director de la USAL.
Otro factor que influye en los costos son las nuevas normativas de
reaseguro. La Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN) resolvió
que las aseguradoras locales que deseen reasegurarse deberán celebrar - a
partir de septiembre- contratos con compañías domiciliadas en la
Argentina. En la actualidad, no existen firmas dedicadas a ese rubro en
el país. Asimismo, la seguidilla de catástrofes naturales (terremotos,
tsunamis, grandes inundaciones, entre otrosd) llevó a las reaseguradoras
a tomar más recaudos a nivel mundial. Esta postura influiría también en
los precios de los seguros.
Fuente: goseguros.com